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domingo, 9 de noviembre de 2014

Anna Politkóvskaya

En esta entrada me gustaría hablar de una gran periodista, Anna Politkóvskaya, que fue amenazada en diversas ocasiones y la asesinada en 2006. Oficialmente no se sabe la razón de su asesinato, pero todos sospechamos que fue por sus trabajos. Cuando la mataron, ella estaba investigando sobre las torturas en Chechenia. Antes de realizar una pequeña reflexión sobre su caso me gustaría contaros su biografía:

Anna nació el 30 de agosto de 1958 en Nueva York (Estados Unidos) y se hizo famosa por sus reportajes sobre Chechenia.

Publicó seis libros, todos relacionados con Rusia, Putin y el conflicto de Chechenia. Además ganó numerosos premios, entre ellos uno póstumo:

- Premio de la Unión de Periodistas Rusos y premio global de Amnistía Internacional Reino Unido al periodismo por los Derechos Humanos en 2001.
- Premio PEN USA Libertad de Expresión en 2002.
- Premio Lettre Ulysses y medalla Hermann-Kesten en 2003
- Premio Olof Palme y premio Vázquez Montalbán de periodismo internacional en 2004
- Premio por la libertad y el futuro de los Medios en 2005
- Premio Unesco "Guillermo Cano" (póstumo) en 2007

También hizo de negociadora en casos de secuestros entre el que destaca el ocurrido en 2002, donde un grupo de chechenos secuestraron a los espectadores de un teatro de Moscú. Durante un vuelo a Beslán, para hacer de negociadora otra vez, fue envenenada pero consiguió sobrevivir.

Fuente: 20 minutos

Su asesinato: el 7 de octubre de 2006, su vecina encontró su cuerpo tiroteado y sin vida en el ascensor del edificio donde vivía. Como dato curioso me gustaría destacar que la fecha de su muerte coincide con el cumpleaños de Vladimir Putin.

Los responsables de su muerte fueron detenidos, pero en 2009 fueron absueltos por falta de pruebas. Según el diario El Mundo: uno de los culpables había reconocido que había sometido a vigilancia a la periodista, que compró un arma y que se la pasó al autor material del crimen.

En esta entrada me gustaría retomar el tema principal de la entrada anterior: periodistas asesinados por ejercer su trabajo.

Anna era conocida como la conciencia moral de Rusia. Durante toda su vida luchó por los derechos humanos y siempre se mostró en contra del conflicto de Chechenia.

Se sospecha una cierta relación entre su asesinato y el gobierno de Vladimir Putin, ya que este no se sentía cómodo con el estupendo trabajo que Anna realizaba, porque no le dejaba en buen lugar.
No me entra en la cabeza como alguien puede ser capaz de matar a una persona, pero lo que todavía más me cuesta creer es que la mataran por el simple hecho de decir la verdad. Si los gobiernos de este mundo hicieran las cosas como deben… esto no pasaría.

Todos los periodistas asesinados solo hacían su trabajo y alguien les arrebató su vida por esta razón. Los periodistas no son peligrosos pero si poderosos. Alguien que es importante en un país y tiene algo que esconder tiene que temer a los periodistas porque estos probablemente descubran la verdad, pero solo eso. Si tú has hecho algo mal y te descubren, es asunto tuyo, pero el periodista no tiene culpa de nada. El trabajo del periodista es descubrir la verdad.

Pero lo que más rabia me da del caso de Anna Politkóvskaya es que se encontró a los culpables pero estos no fueron condenados por "falta de pruebas". Lo de falta de pruebas me suena raro, ¿a vosotros no?

Que la fecha del asesinato de Anna coincida con el cumpleaños de Putin, que el presidente ruso la tuviera fichada por su fuerte oposición al gobierno y al conflicto de Chechenia… Me parecen demasiadas casualidades y la verdad, no creo en las casualidades.

“El que quiera trabajar como periodista o es servil a Putin o puede pagar su activismo con la muerte, la bala o el veneno” – Anna Politkovskaya

Fuentes:

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